El legado de Steve Jobs bien puede resumirse en que para conectar los puntos no sólo debemos mirar hacia adelante, hay que hacerlo mirando hacia atrás… confiando que, eventualmente los puntos se conectarán en el futuro.
Destino, karma, trabajo duro, suerte, puentes… como sea que decidas llamarle, pero eventualmente, sucede.
Aprender de todos, y de todo… de tipografías, de colores, de estrategias de venta, de calidad en los productos, de procesos, de técnicas de escribir, de maneras de leer a las personas, de hábitos… de todo. Y si esa hambre de aprendizaje va tildada de empatía, lo adquirido es exponencial.
La curiosidad, la intuición y el creer en sí mismo te abrirán más caminos de los que crees. No tengas miedo si un ciclo termina, o si se abren tres y estás dubitativo de elegir el correcto. Elegirás bien, porque al final la mejor decisión es la que se toma.
El que quiere crear tiene que decidir, aventurarse y aprender. Y decidir no solamente habla de elegir un camino luego de haberlo razonado, sino del mundo emocional que le rodea.
“Las cosas mejoran conforme pasa el tiempo… no te conformes” -Steve Jobs.
¿Tomamos mejores decisiones si confiamos en esa corazonada y ese instinto? No lo sé… lo que he aprendido es que si no seguimos esas corazonadas y esos instintos, nos estancaremos.
Mañana arranca otra semana, y vuelve a ser otra oportunidad.
Abrázala bien y conviértela en una semana para acercarte más a esa persona en quien te quieres convertir.
Se puede.